La edición italiana de Wikipedia, en su última actualización sobre el “RadicchioRosso de Treviso”, ( 31.03.2013) menciona el hallazgo de Tiziano Tempesta que, en el cuadro Bodas de Canaan (1579 -82) de Leandro Dal Ponte llamado Bassano, ve en el 2007 un manojo de radicchio rojo demostrando así “como el radicchio era cultivado ya desde la mitad del siglo XVI”. Continúa afirmando que “el proceso de producción se habría afinado sólo en la segunda mitad del siglo XIX. Habría sido el viverista Francesco Van den Borre llegado de Bélgica en 1870 para realizar un jardín patricio, quien trajera a la zona de Treviso, la técnica del blanqueo ya usada para la achicoria belga.”
Si la cita de Tempesta es correcta, la atribución - si bien condicionada - a Van den Borre del mérito de haber hecho conocer a los campesinos trevisanos las técnicas de blanqueo de la achicoria, no es otra cosa que la repropuesta de una leyenda inventada por el gastrónomo escritor Giuseppe Maffioli, hoy valorada por otra autoridad en el campo de la enogastronomía, Giampiero Rorato quien se considera discípulo de Maffioli.
Uso, no por casualidad, el término leyenda (en el sentido de noticia falsa) porque hasta la aparición del primer número de la revista Vin Venetola famosa Vitlof , la achicoria de Bruselas blanqueada, el radicchio de Treviso podría ser mucho mas útil a la horticultura trevisana y su exportación sería diez veces mayor… ».
¿Es creíble pensar que si su padre hubiera sido realmente el inventor del Radicchio, Aldo Van Den Borre, no lo habría recordado y no le habría dado una justa importancia? Obviamente no, no es creíble.
Sin embargo Maffioli sostiene que sí y para dar mayor crédito a su tesis modifica agregando un texto apócrifo un escrito de los años 20 del mismo Aldo Van Den Borre, La Coltivazione della Cicoria Rossa di Treviso incluyéndolo sea en el Vin Veneto que en el sucesivo La Cucina Trevigiana
El radicchio rojo de Treviso es presumiblemente una planta endémica cultivada desde hace tiempos inmemoriales con una técnica, fruto de la observación y experimentación de los campesinos locales.
Su presencia en la pintura del cinquecento, que tiene como tema una escena de vida popular, lo confirma.
Otro asunto es su apreciación como especialidad gastronómica y el consiguiente aumento de valor comercial iniciados en la segunda mitad del 800.
Esta valoración fue favorecida (tal como traté de demostrar con Raici hace 20 años) por el desarrollo de la ferrovía y por el impulso dado a los comercios por la abolición de los impuestos aduaneros, no posteriormente a la unificación nacional sino a la unión del Véneto con Italia en 1886. A este respecto es muy significativa la obra del piamontés Francesco Cirio, el más grande de los exportadores italianos, que comercializó el radicchio en algunas ciudades importantes italianas y europeas. Fue particularmente fructífero el compromiso del agrónomo de origen Lombardo Giuseppe Benzi quien el 20 de diciembre de 1900 dió origen a la muestra histórica del radicchio en la Loggia del Palazzo dei Trecento en Treviso y que por décadas siguió su desarrollo en las columnas periodísticas de la Gazzeta del Contadino.
En este contexto se toma la obra de los Van Den Borre con su histórico “establecimiento hortícola” que se recordará no, por el descubrimiento de una técnica ya sabida, sino por la selección de las semillas, los escritos de divulgación de Aldo, su óptimo catálogo que hizo conocer esta “maravillosa variedad de radicchio (achicoria)… en cada ciudad de Italia y en el extranjero.”
Traducción: Virginia Ros
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| Achicoria roja - Radicchio rosso Treviso - Historia, Traducción Virginia Ros |
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